El proceso de buscar empleo puede ser visto por muchas personas como algo complejo, más aún si durante un tiempo prolongado se estuvo en una misma empresa y no hubo necesidad de postular a nuevas vacantes. Ante dicho contexto, desconocido para algunos o poco explorado para otros, muchos pueden cuestionarse por dónde comenzar. La respuesta para dicha interrogante radica en que el primer paso es ordenarse.
Lo anterior, se vuelve más importante aún si funcionamos desde la lógica que buscar trabajo, es un trabajo, y para trabajar nos ordenados y planificamos, establecemos rutinas, funciones por cumplir y objetivos. Con base en lo ya mencionado es que, a fin de establecer un orden inicial, hemos definido 5 puntos para tener en cuenta, los cuales se detallan a continuación:
1.- Conocer el mercado y el contexto actual en la búsqueda de empleo:
Al iniciar la búsqueda, cobra relevancia comprender qué está pasando actualmente en el país donde resido, qué rubros están al alza y cuáles se encuentran detenidos. Lo anterior puede variar según las circunstancias que se estén viviendo y, también, puede variar en las distintas zonas del país. Si bien, no se trata de ser expertos en economía, se puede indagar en portales especializados y estar al día con el acontecer noticioso para comprender si aquello en lo que me especializo es cotizado en el momento o si, tal vez, es necesario reinventarme y buscar nuevos horizontes. Lo anterior, en cuanto al mercado, mientras que en referencia a la búsqueda propiamente tal, se sugiere comenzar a indagar en las ofertas vigentes, leerlas y detectar cuáles son los requisitos que actualmente se solicitan, qué funciones son las que más se demandan y cuáles son las características principales que aparecen. Un ejemplo de este último punto puede ser la modalidad Teletrabajo, la cual en muchos casos ha llegado para quedarse, por lo que sería importante saber si el cargo que busco puede desempeñarse bajo dichos criterios y si se está preparado para asumir dicho desafío.
En relación con la búsqueda, años atrás la estrategia era diseñar un Currículum Vitae, imprimir varias copias y salir a buscar lugares donde entregarlo, sin embargo, esa es una estrategia que hoy ya no se utiliza, debido a que demanda tiempo y recursos. Con el tiempo, la llegada de la tecnología dio paso al surgimiento de los portales de empleo, pero, luego, apareció Linkedin como una herramienta potente, la cual rápidamente se posicionó dentro del ámbito laboral y, más específicamente, en los procesos de reclutamiento y selección. Lo anterior, debido a que en Linkedin se hace fácil, para los reclutadores, publicar una oferta, y para los candidatos, informarse al respecto y postular.
Posteriormente, las nuevas tendencias trajeron consigo el concepto de Redes de Contacto o Networking, aludiendo a aquellas relaciones que se forjan con base en la colaboración mutua y mediante las cuales se puede acceder a información, instancias de aprendizaje o acompañamiento y apoyo en el proceso de búsqueda. En conclusión, en cuanto a contexto actual, se puede decir que Portales, Linkedin y Redes de Contacto son tres aspectos que debemos conocer e implementar para darle mayor efectividad a la búsqueda de empleo.
2.- Autoconocimiento
Junto con conocer el mercado es primordial el autoconocimiento, ya que esto ayuda a entender qué quiero y hacia dónde voy, es decir, a definir el foco de la búsqueda. Lo señalado tiene la finalidad de no dispersar energía y no centrarse en ofertas laborales que no se ajustan ni a mi perfil ni a mis preferencias. Este proceso se une al análisis del mercado, ya que se incluyen preguntas como ¿El rubro en el que me desempeño o en el que me quiero insertar está en alza o en baja? ¿Requiero de algún conocimiento nuevo según los requisitos más nombrados en las ofertas? ¿Tengo disposición para trabajar desde mi hogar? Etc.
Para realizar un proceso de autoconocimiento hay algunas herramientas que podemos implementar, como, por ejemplo, el análisis FODA, el cual nos brinda una perspectiva respecto a nosotros mismos y de aquello que somos capaces de hacer. Si un FODA no nos parece una herramienta sencilla, se recomienda trabajar en responder lo más ampliamente posible 3 preguntas claves, las cuales son: ¿En qué tengo experiencia y qué funciones podría desempeñar? Con base en mis conocimientos ¿qué me siento capaz de hacer, pese a que no tengo experiencia en ello? y, finalmente, ¿Qué no estoy dispuesto/a o no quiero hacer?.
Si existe la sensación de estar confundido o bloqueado, de igual modo, se puede recurrir a terceros, solicitando ayuda a ex Jefaturas o ex compañeros de trabajo, amistades que conozcan mi desempeño laboral o familiares, consultándoles respecto a cuáles son las fortalezas y aspectos para potenciar que visualizan en mí. En este ejercicio se torna importante la tolerancia para escuchar y aceptar lo que me dicen y la autocrítica.
3.- Revisar documentación
Una vez que se tiene conocimiento del mercado y que se ha definido el foco laboral, es tiempo de actualizar los perfiles personales en los portales más solicitados y, sin lugar a duda, en Linkedin. Una vez que lo indicado está listo y que se ha empezado a postular es preciso estar preparado con cierta información y documentos para asistir a entrevista, esto en caso de que sean solicitados, para tener acceso rápido a ellos y enviarlos.
a) Títulos y certificados: Se sugiere tener guardados dichos documentos en el celular a fin de enviarlos rápidamente cuando sean requeridos. (Se recomienda que se envíen solo si se solicitan, no antes)
b) Referencias Laborales: Esto se refiere a los datos de contacto de Jefaturas directas que se hayan tenido, no compañeros, amigos ni familiares, sino que Jefaturas a las que se les haya reportado directamente. Al participar de entrevistas es común que se soliciten dichos l objetivo es tener acceso rápido al nombre, correo y número telefónico de dichas personas, idealmente de las dos últimas, para poder entregar esa información cuando es solicitada.
c) Currículum Vitae: se debe trabajar en la actualización de este documento, teniendo especial cuidado en la redacción y ortografía. En cuanto a la información que el CV debe contener, hacemos una división de 6 ítems, partiendo por el encabezado que incluye los datos de contacto, para proseguir con resumen profesional, experiencia laboral, antecedentes académicos, formación complementaria (cursos) y competencias técnicas. Es importante revisar que todos estos ítems estén actualizados, ya que dicha información será clave para que el Reclutador decida si nos ajustamos a no a la vacante que busca cubrir.
4.- Redes de contacto (Networking)
Junto con postular a ofertas vistas en portales, se torna necesario hacer una búsqueda activa de empleo y, en ello, las redes de contacto juegan un rol fundamental. Esto se trata de tomar contacto con quienes puedan ayudarnos en nuestro proceso de búsqueda, siendo importante que la colaboración sea mutua y que nosotros también podamos brindar ayuda. En este ámbito es importante aclarar que no se trata del llamado coloquialmente “pituto”, sino que más bien se relaciona con un intercambio de información, ya sea de ofertas de trabajo, cursos gratuitos o pagados, datos de contacto de otras personas que puedan ayudarnos, etc. En relación con lo indicado, si bien, nuestras redes pueden referirnos para un empleo, de igual modo tendremos que participar de un proceso de selección, donde el resultado dependerá de nosotros.
Ahora, respecto a quiénes son nuestras redes de contacto, podemos decir que son todos nuestros conocidos que consideramos pueden ayudarnos: compañeros de trabajo, compañeros de universidad, profesores, familiares, ex jefaturas, etc. Pero nuestra red puede crecer día a día, como, por ejemplo, con aquellos a quienes conozcamos en un nuevo curso o taller. Lo importante es que estas personas sepan de mi búsqueda y poder sostener trato con ellos a través del tiempo.
En relación con las redes de contacto, Linkedin toma relevancia ya que es una herramienta que nos ayuda a incrementar nuestra red. Con base en lo indicado, una buena primera meta por cumplir sería fijar un número de nuevas conexiones en nuestro Linkedin, comenzar a buscar y enviar la notificación de conectar, incluyendo principalmente, a nuestros conocidos que trabajan en los sectores de mi interés, a los profesionales del área de reclutamiento y selección y a quienes ocupen el cargo que podría ser nuestra jefatura a fin de que ellos puedan visitar mi perfil y considerarme para ser parte del equipo que lideran. Conectar con estas personas nos permite dos cosas, primero, visualizar las ofertas que ellos publican y, segundo, ser vistos por otros profesionales, quienes pueden tomar contacto con nosotros para ofrecernos participar de un proceso de selección.
Si bien, no contamos con número exacto, sí podemos decir, con base en la experiencia, que muchas de las ofertas se masifican de manera interna, no siendo publicadas en portales, por lo que aquí, lo que necesitamos es conocer a personas clave que nos entreguen dicha información.
5.- Planificación
Al igual que cuando trabajamos, al buscar empleo la planificación cobra relevancia, ya que nos ayuda a mantener un orden, tener más claridad de nuestras postulaciones y aminorar nuestra ansiedad e incertidumbre. Si pensamos que buscar trabajo, es un trabajo, entonces entendemos que la planificación, el orden y la disciplina son primordiales, por lo que se sugiere establecer horarios para la búsqueda, en los cuales se revisen portales, se busquen personas con quienes conectar en Linkedin, se investigue respecto a las empresas en las que me interesaría trabajar, se asista a webinars y cursos, se establezca contacto con nuestras redes y se haga seguimiento de redes y de postulaciones. Para lo anterior, se puede trabajar con una tabla simple de Excel, usando una pestaña para registrar los contactos realizados con otros y otra para registrar todas las postulaciones a las que se ha aplicado. Tener un registro de las postulaciones ayuda a verificar en cuáles se ha tenido mayor éxito siendo contactado y en cuáles menos, pudiendo de ese modo, comprender en qué cargos puedo destinar mayor energía y tiempo al momento de buscar ofertas. A su vez, dicho registro permite tener claridad y al momento de ser contactado, ya que si no recordamos una postulación podemos buscarla en la pestaña de Excel e informarnos para luego indagar más información y estar preparado para entrevista.
En conclusión, ratificamos que, si bien, buscar empleo puede ser una labor ardua para algunos, tener un orden puede ayudarnos bastante a tener mayor efectividad y a tomar decisiones más estratégicas en nuestro proceso, por lo que la invitación es a armar una estrategia de trabajo, hacer seguimientos y analizar los pasos que hemos ido dando a fin de reinventar la estrategia a tiempo en caso de que sea necesario.
Claudia Garate
Orientadora Laboral